5. Los activos de la familia empresaria
La riqueza es mucho más que dinero y propiedades. Las familias empresarias deberían tener claro que, cuando se habla de patrimonio, son más importantes los aspectos cualitativos que los cuantitativos.
Cuando se hace balance de la fortuna familiar, no sólo hay que medir el incremento o disminución de los aspectos financieros. También hay que tener en cuenta los aspectos cualitativos: el capital humano, el capital intelectual, y el capital material.
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La riqueza de la familia empresaria es un concepto poliédrico formado por los activos materiales, pero también por los inmateriales. Las personas son el activo más importante que tienen tanto las familias empresarias como las empresas familiares.
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Los activos intelectuales son el bagaje de conocimientos y de educación que tiene cada miembro de la familia empresaria. Es muy importante que los familiares estén preparados intelectualmente para ser parte de la empresa familiar, ya sea de forma activa o pasiva.
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El capital humano y el capital intelectual son dos activos esenciales, pero los activos materiales o bienes también son un activo importante, el primero en el que solemos pensar cuando hablamos de riqueza. El patrimonio material incluye las inversiones, los activos de ocio de uso común y los activos económico-emocionales.