Miele, 120 años facilitando las tareas del hogar

Imagen: web de Miele

Miele, la conocida marca de electrodomésticos, empezó vendiendo desnatadoras a finales del siglo XIX, pero pronto empezó a diseñar lavadoras. Actualmente no solo fabrican electrodomésticos para uso doméstico, sino también lavavajillas, lavadoras y secadoras de uso industrial, así como maquinaria para el tratamiento de material médico y equipos de laboratorio. En este artículo repasamos la trayectoria de esta empresa familiar alemana con más de un siglo de vida. Podéis leer su historia completa en el libro 100 familias que cambiaron el mundo.

Los fundadores

Miele fue fundada en 1899 por Carl Miele y Reinhard Zinkann en Renania del Norte-Westfalia (Alemania). La empresa comenzó fabricando máquinas centrifugadoras para desnatar la leche, pero un año después de su creación empezó a diseñar y producir lavadoras. Por aquel entonces, la ropa se lavaba manualmente. Para facilitar esta tarea, la compañía se propuso crear una máquina capaz de sustituir el esfuerzo manual. La nueva actividad de la empresa coincidió con años de importante mejora en las condiciones de vida de los europeos, asociadas a las demandas del movimiento obrero y al nacimiento de la clase media.

Las primeras lavadoras precisaban de una buena parte de labor manual, pero aun así tuvieron muy buena acogida en el mercado. En 1911, lanzaron la primera lavadora eléctrica. En esta época, la empresa también experimentó con la fabricación de automóviles, actividad que pronto abandonó.

Desde el principio, los fundadores apostaron por crear productos de calidad y con una larga durabilidad, aunque eso supusiera un precio elevado. A principios del siglo XX, se establecieron cuatro oficinas regionales y varias fábricas que permitieron a Miele generar todas las piezas empleadas en sus productos y controlar todo el proceso de producción.

Los fundadores de la empresa siempre apostaron por la innovación, lo que les ayudó a superar los difíciles años de entreguerras y la Gran Depresión. Estuvieron al mando del negocio hasta su muerte, en la década de 1930.

2ª generación

Los socios fundadores fueron sucedidos por sus dos hijos. La llegada de la segunda generación coincidió con la Segunda Guerra Mundial. Al finalizar la contienda, la capacidad de producción de la compañía se había reducido considerablemente, debido a que el gobierno les obligó a destinar parte de la producción a fines militares y a que muchas fábricas resultaron dañadas por los combates.

La reconstrucción del país dio un nuevo empuje a la empresa a partir de la década de 1950. Cuando las lavadoras se trasladaron del sótano de las casas a la zona de vivienda, se generó una nueva necesidad: los electrodomésticos para la cocina. Para satisfacer esta demanda, Miele amplió su catálogo de productos y entró en un nuevo mercado emergente: el de las cocinas con armarios empotrados. La compañía apostó por vender la cocina entera equipada con varios electrodomésticos.

3ª generación

La tercera generación de la familia propietaria se incorporó a Miele a mediados de la década de 1980 y dio un nuevo rumbo a la compañía al acelerar su internacionalización. Abrieron tiendas y oficinas en Australia, Sudáfrica, Irlanda y Estados Unidos. En los veinte años siguientes se sumaron 30 países más, incluyendo el continente asiático.

Tras la caída del Muro de Berlín y la reunificación de Alemania, cuando muchas empresas apostaron por deslocalizar la producción para reducir costes, Miele decidió concentrar toda su producción en su territorio. Esta decisión respondía a uno de sus objetivos fundacionales: mantener los elevados estándares de producción.

En la actualidad

En la década de 1990 las ventas de Miele continuaron creciendo y superaron por primera vez los 1.500 millones de euros, en su mayor parte provenientes de la exportación. Tras 120 años de historia, la empresa sigue siendo hoy propiedad de las familias Miele (51%) y Zinkann (49%).

Gobernada actualmente por la cuarta generación, la compañía está presente en cerca de cien países y cuenta con 20.098 empleados en todo el mundo, más de la mitad de los cuales están en Alemania.

Para saber más: