Roche, más de un siglo innovando en el sector farmacéutico

Imagen: web de Roche

El banquero Fritz Hoffmann-La Roche lanzó F. Hoffmann-LaRoche & Co en 1896, con 28 años. Fue un precursor de la fabricación a gran escala de medicamentos. Desde entonces, Roche ha crecido hasta convertirse en una de las compañías farmacéuticas líderes del mundo, como explican en su página web.

A continuación, repasamos los principales hitos de la historia de esta empresa familiar. Podéis leer el caso completo en el libro 100 familias que cambiaron el mundo.

Fundación y primeros lanzamientos

F. Hoffmann-LaRoche & Co. nació cuando la Revolución Industrial transformaba Europa. En 1896, Fritz Hoffmann-La Roche y su esposa Adele La Roche lanzaron esta compañía como sucesora de Hoffmann, Traub & Co, con sede en Basilea, Suiza.

Desde el principio, la empresa apostó por la innovación y llevó a cabo una intensa labor para comercializar internacionalmente los medicamentos que fabricaba. Pronto empezaron a exportar sus productos y abrieron filiales en Italia y Alemania. Más tarde llegaría la apertura de filiales en Milán, Nueva York, San Petersburgo y Londres.

El mismo año de la fundación, Carl Schaerges, responsable de investigación, publicó los primeros artículos científicos y registró la patente del Aiodin, uno de los primeros medicamentos desarrollados por Roche. También en 1896 se lanzó otro medicamento, el antiséptico Airol. El primer gran éxito llegó dos años después, con Sirolin un jarabe para la tos con sabor a naranja que se vendía sin receta médica y que se mantuvo a la venta más de 60 años.

La Primera Guerra Mundial

El estallido de la Gran Guerra y la pérdida del mercado ruso debido a la Revolución de 1917 supusieron una importante crisis financiera para Roche. La compañía estuvo al borde de la quiebra y acabó convirtiéndose en una sociedad limitada.

Tras la muerte de Fritz Hoffmann en 1920, la dirección de la empresa pasó a manos del doctor Emil Christoph Barrel, que trabajaba en la empresa como químico desde su fundación. En esta nueva etapa, Roche recuperó las tasas de crecimiento anteriores a la guerra y siguió expandiendo su gama de productos con analgésicos y vitamínicos, como Redoxon y Benerva.

La Segunda Guerra Mundial

A las puertas de la Segunda Guerra Mundial, la compañía trasladó a numerosos científicos europeos a Estados Unidos, incluido el doctor Barrel, para que pudieran continuar con sus investigaciones. Finalizada la guerra, la empresa recuperó la normalidad y la actividad científica de la compañía volvió a despuntar.

En esta etapa, Roche dio algunos pasos en la diversificación del negocio con la creación de Pantene AG, una filial especializada en productos para el cuidado del cabello que vendió en 1982.

La segunda mitad del siglo XX

Emil Christoph Barrel falleció en 1953 y le sucedió el doctor Albert Caflisch. En esta nueva etapa, la empresa continuó su internacionalización, intensificó la investigación y diversificó la producción. A finales de la década de 1950, la gama de productos de Roche incluía antidepresivos, medicamentos antiinflamatorios y cardiovasculares, agentes antimicrobianos y productos quimioterapéuticos.

En 1965 el doctor Caflisch cedió su puesto al doctor Adolf Walter Jann. Bajo su dirección, Roche emprendió un profundo programa de diversificación, que se plasmó en la adquisición de varias empresas y en la fundación de diversos centros de investigación, como el Instituto Roche de Biología Molecular. Roche se focalizó en el campo de la biotecnología y las pruebas diagnósticas.

En 1978 Fritz Gerber sustituyó al doctor Jann al frente de la compañía. Este fue el comienzo de una época complicada. A la delicada situación económica se sumaron la expiración de numerosas patentes y diversos escándalos y problemas, como la explosión de un reactor en 1976. Gerber decidió centrarse en la consolidación de los segmentos con mayor potencial de innovación, crecimiento y beneficio. Así, la empresa se desprendió de algunas filiales, esencialmente las dedicadas a vitaminas, perfumería y cosmética, y se centró en su principal negocio: los productos farmacológicos.

Además de lanzar nuevos medicamentos, entre los que destacaron los fármacos contra el cáncer y el VIH, Roche realizó importantes avances en el campo de los análisis diagnósticos, que la llevaron a convertirse en líder mundial en esta área. Con la compra en 1991 de Nicholas, fabricante de medicamentos genéricos, Roche reforzó su cartera de productos sin receta médica, un sector que comenzaba a despuntar.

En estos años, el grupo farmacéutico suizo continuó fortaleciendo su presencia en los mercados internacionales, especialmente en Estados Unidos. Fritz Gerber renunció a su puesto en 2001 y le sucedió el doctor Franz B. Humer. Desde 2008, el CEO de la empresa es Severin Schwan.

En la actualidad, la empresa continúa centrando su actividad en los productos farmacológicos y en la medicina diagnóstica, y es una de las compañías más innovadoras y punteras del sector. Las familias Hoffman, La Roche y Oeri poseen la mayoría de las acciones del grupo farmacéutico.

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